¿Qué deberá ocurrir para devolver al tiempo la cordura? Estamos reventando los segundos con mediocres programas de televisión, leyendo inútiles bestsellers que no sirven absolutamente para nada, consideramos ocio ir a centros comerciales a pasearse entre escaparates, aguantando las miradas de asco de los dependientes de las mismas tiendas, rivalizando y despreciando siempre al prójimo, faltando autocrítica, mucha autocrítica. Y, para más INRI, sufrimos un mercadeo de tiempo espantoso, un compra-venta absoluto, pues, mi sueño como el de muchos, es lograr comprar mi tiempo y no acudir diariamente a ser un esclavo que vende su tiempo por migas de pan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario