Mi nueva orientación

Me tomaré un tiempo para saborear en mi paladar, en mis oidos, al fin y al cabo, en todos mi sentidos, el nuevo disco del maestro entre los maestros de la canción. Quique González y su "Daiquiri Blues" representan un golpe en la mesa de las radiofórmulas, un disco de sentimientos, reflexiones y un gusto exquisito por la canción.

Con este disco y Nacho Vegas, tienen algo que darme.

La verdadera justicia

Todos queremos sentirnos iguales ante la ley, y en cualquiera otra cosa. Pero todos sabemos que siempre será una pantomima. Lo único que nos hace iguales es la muerte, pues todos acabamos igual. Si la muerte es la solución en esta ley natural, propongo un suicidio colectivo. Esperemos unidos al dictamen que imparte la injusticia.

Gracias

A menudo me replanteo si contigo me estaré equivocando, te estaré haciendo daño, por mi forma de ser, de sentir, por llenarte la cabeza de guerras que tan solo me pertenecen a mí. Aguantas mis tonterías, mis desvaríos, mis días de ira y auto-destrucción. Tú siempre ofreces la más tierna sonrisa, abrazos llenos de tranquilidad. Veo tus fotografías en soledad, y me doy cuenta de tu valor real, un valor infinito e indescifrable. Has arriesgado tu vida, tu futuro y tu dignidad por mí, y aunque no lo creas, lo valoro muchísimo. Espero y deseo (del deseo nace la infelicidad) que jamás te arrepientas de todo esto que ha ocurrido y ocurrirá. Gracias.

Soledad

Y la soledad hizo de mi hombre, un ser real, sin máscaras ni artificios, crudo y sin ingredientes añadidos. En ella, me descubro, me escupo a la cara la verdad, me deleito con mis conversaciones. Con algunas personas, es como estar en soledad. Aunque hay muchas maneras de sentir la soledad con la gente, en lugares donde no tienes nada que ver y te sientes indiferente y poco atraido por la idea común, y otra forma (que es a la que me refiero yo) de personas que rodean mi vida, mi espacio y mis pensamientos, que sin lugar a dudas, con ellas consigo ese estado de sosiego y tranquilidad que la soledad ofrece, y a todo esto, yo lo he llamada la soledad de espíritu, pues, la unión de ambos espíritus, hace pasar momentos apoteósicos y con ello, odiar un poco menos al ser humano.

Mi soledad, indestructible y espartana.

El paseo

Maestro y discípulo paseaban dubitativos por el frondoso bosque que les rodeaba. Discípulo, joven apasionado por el saber, comenzó diciendo:

- Maestro, verá, es que como bien sabe, soy un joven lleno de dudas y preguntas.
- Lo sé, dime.
- Es que tengo grandes problemas en sociedad, siento un rechazo generalizado por la gente, y la única opción que veo es la soledad, pues no les aguanto. En ella, veo demasiada hipocresía, mentiras, cortesía barata y una mentalidad detestable.
- Tiene que aprender una cosa joven discípulo... No podemos vivir solos ni enfrentados, la mutua relación ha de servir a todos. Está verdaderamente bien, que seas crítico con la sociedad, los hombres no somos ni seremos capaces de aguantarnos jamás, pero es imprescindible hacerlo.


* Pequeña conversación inspirada en una cita de M. Miret.

La generación- Sin autor.

Como la generación de las hojas
así la de los hombres
-dice el viejo Homero-
Soñamos con cambiar el mundo
y el mundo nos cambió.
Quisimos robar el fuego del alto cielo
y el sida nos exterminó.
Quisimos ser rebeldes y puros
y la realidad
-ese pulpo ingobernable-
nos sometió.
Hoy volvemos a los antiguos sabios
Heráclito, Sófocles y Parménides.

Cada generación tiene su Génesis
Cada generación tiene su apocalipsis
No se puede más que aspirar a morir en una cama
de muerte natural, si es posible y sin mucho sufrimiento.

Las palabras

Y volarán mis palabras
Soñarán solas sin ningún tipo de ayuda
Serán leídas e interpretadas
Escuchadas y recitadas
Despreciadas e indiferentes

Formarán parte de vidas ajenas a la mía
Con ellas reflexionarán o se reirán

Y aunque pierda su significado real
Siempre quedará el sabroso sabor de la creación
De las horas luchando a solas con mi corazón
Sin ninguna razón más que la necesidad por sí misma

Y volarán libres como el humo de las fábricas
Creadoras de angustias, sufrimiento y miseria.

Y cuando sienta frío demandaré su calor
Cuando sienta hastío me esconderé en ellas
Sólo si ellas lo desean lograré volverlas a leer
Sin sentir dolor y recordar por que llegué hasta ellas.

Son mis humildes palabras
Las que se enredan por mi pelo y me obligan a escribir.
Son en fin las palabras las que han condenado mi vida
a luchar sin saber con quien ni donde.

Debajo de mi casa...

Debajo de mi hogar, tengo a Ignatius Reilly, aquel estrambótico personaje de "La conjura de los necios" es un vecino paranoico, obsesivo y posesivo. Hay ocasiones en las que creo que me observa, cuando cojo el correo, cuando voy a trabajar, cuando vengo de trabajar, en ocasiones, al estar casi saliendo por la puerta del portal, abre su puerta, mira, y vuelve a cerrarla. Cuando paseo cerca de su terraza, lo veo entre las cortinas, observando inquisitivamente. Mira con desprecio, como buscando en tu vida algún resquicio por el cual hundirte. Esto o que se aburre mucho el pobre hombre.

El "símbolo" de la paz.

Desde hace un tiempo hasta aquí, llevo observando atónito, la aparición de distintos mitos políticos y movimientos sociales, en personas las cuales, jamás serán consecuentes a lo que eso representa, y por si fuera poco, no tienen una idea real de todo ello. Un mito político y revolucionario, Ernesto Guevara de la Serna, más conocido como “Che” Guevara, invade camisetas, pines, solapas, camisetas, y lo portan personas que no saben realmente de esta figura, a menudo, o simplemente son partidarios tan solo de lo que los interesa (para mí un asesino, siempre defenderé esa posición) absolutamente nada.
Pero del tema sobre el cual, quería escupir mi más sincera repulsa, son aquellas personas que llevan el símbolo de la paz por moda, que aún no sabiendo su significado, desprestigia al movimiento pacifista en sí, estos hijos del zara, stradivarius y de Berskha, serían capaces de matar utilizando estos mismo símbolos.
La mediocridad de la sociedad hace a los símbolos de luchas mediocres, vulgares. Son símbolos de la decadencia capitalista, que hace negocio del anticapitalismo, suena gracioso.
Estúpido ser humano, creador del más horroroso infierno, luego, con tener una actitud victimista, ya tenemos todo solucionado. Sea vuestra vida corta.

Superación humana (entre el bien y el mal)

La vida no es sólo cuestión de perder o ganar, también hay que ver perder y ganar, sentir la derrota del prójimo y celebrar su victoria con júbilo y con una alegría natural y sincera. No existe acto más brillante y en el cual vaya tan implícito la superación espiritual, que obrar y actuar sin segundas intenciones, ayudar a los demás sin esperar beneficio alguno en ello, ni una felicitación, ni una sonrisa, ni un agradecimiento, y mucho menos, beneficio económico.
Dada mi misantropía, es para mi un gran reto, no el respeto por el ser humano (aunque podría aumentarse a los seres vivos, sin ningún problema) que lo tengo, si no, el poder ayudar a quien crea y hacerlo sin que en mi interior surjan dudas, desprecio y obligación en ello. En este mundo, donde el odio y el insulto es la tónica de la sociedad, donde la corrupción y la picaresca es un orgullo, actuar correctamente, y por lo tanto, ser buena persona, es siempre un sobreesfuerzo casi inalcanzable, ya que estamos llenos de mierda hasta el cuello, de una cultura basada en la mentira, y por mucho que lo piense, y por mucho que me quiera frustrar, siempre será así. Ese será mi único reto real, encontrar en mi realidad algo que merezca la pena en mí, el ayudar a los demás como algo cotidiano, natural y que para ello, no tenga que realizar ningún tipo de esfuerzo. Sigo el camino accidentado…

Gandhi

Ahora, cumplido el 140 aniversario del nacimiento del único político incorruptible, quiero dejar aquí una reflexión absoluta.


Cuida tus Pensamientos porque se volverán Palabras.

Cuida tus Palabras porque se volverán Actos.

Cuida tus Actos porque se harán Costumbre.

Cuida tus Costumbres porque forjarán tu Carácter.

Cuida tu Carácter porque formará tu destino

Y tu Destino será tu vida...